jueves, 14 de abril de 2011

intimidad, pasión, compromiso...

Intimidad, como susurro penetrante por tu piel, como único aíre para respirar, como oxígeno puro para vivir, como irresistible humedad cálida...

Pasión, como sabor derramando sobre mis labios, como dómino de mi piel en erizando, como poro partícula de tu ser… …y sentir…

Compromiso, asociando en ti cada uno de mis sentidos, como deseo instinto donde volver a confluir, para llegar a mi destino sobre tu fluir…. redescubrir todo lo que hace sentir, lo que puedo lograr, lo que puedo amar… sentir mientras eres….ser mientras siento….equilibrio sin red a la vida… Siete formas de amar, triángulo de Sternberg...



Cariño en sentido trivial. Íntimo, un vínculo cercanía de largo plazo. Tú sendero no será fácil, y mil veces doblaras tu pequeña espalda cansada, pero no olvides que en cada uno de tus pasos me siento contigo, tiene sentido eterno el saber que jamás andarás sola y que mi cariño está más allá de donde imaginas, mas allá de donde llegas.

Encaprichamiento, pura pasión, deseo, sin intimidad, sin compromiso, volátil del momento. La realidad no existe, solo es una interpretación de los sentidos, tu figura es un espejismo ilusorio que mi deseo convierte en real, el tiempo que se empeña en organizar es un absurdo, la intimidad de tu vida diaria no tiene importancia, la única secuencia importante es el roce de tu piel sobre la mía, el bosque profundo de nuestro deseo, la sonrisa placer, la mirada vidriosa deseo, la humedad sobre las sabanas, el licor supremo servido por tus labios, el deseo no engaña, realidad temporal, de un ahora que es siempre el mejor instante de vida, solo entrañas, ni ilusiones, ni acertijos, mis manos húmedas sobre ti y las palabras resecas sin ti.

Amor vacío, compromiso, respeto y reciprocidad, el estadio de pasión e intimidad dormidas. A grito amargo de la visa, a ciegas de los embistes de la furiosa vida, por los rastrojos de los afectos cansados, iniciamos un viaje con meta sin fin, zancadas con el unico camino que recorrer que tiempo. .. alforjas dormidas, pasiones vacías, intimidad en hastió...no importa el polvo del camino, ni la velocidad por llegar a ninguna parte, pero tenemos plomo en las alforjas, verdades que nos doblan las rodillas... el peso espeso del compromiso, el lento descargo del respeto... arrastrando experiencia y paciencia adquirida, lástima sobre vida perdida y seguir camino sin girar la cabeza.

Amor romántico, el estado emocionante de intimidad y pasión, atracción y deseo, buscaba tu deseo entre mis sábanas, concilie sueño, avaricia y respiración…. sicópatas pasión de mis pensamientos, una máquina del tiempo se adueñó de mi mente, cada pensamiento es una escena de orgasmo y seducción.

Amor sociable, soledades compartidas, la pasión se fugo, pero vive cariño y compromiso, tiempo juntos. Sentí tus manos en el peso de mi cuerpo, caricia que sepulta dolor, comprendí que el deseo en mi conciencia había quedado parapléjico, desbordado por el labio de tu sonrisa, me dejo a la deriva, destrozado por mi imaginación desequilibrada y carente de pasión deseo, pero en tu compañía.

Amor fatuo, loco amor, compromiso en su motivo de pasión, sin intimidad, deseo asiduo. Instantes locos de pequeña muerte, tu gozo mi deseo mi mejor amante imaginado, me gusta caminar por tu bella agonía de muerte temporal, me gusta pasear mientras alcanzo la mía y después te vas.

Amor consumado, completo amor, intimidad, pasión y compromiso, la humedad de sus caricias pasea en mi latente memoria, el sendero ilusiona y erosionar la cálida llegada del deseo, temeroso mi deseo ante la necesidad de un beso, pasión que desabrocha la privacidad de mis piernas, seduciendo tu vientre, besos sobre la alborotada espalda y la respiración agitada en serenidad de necesidad... relación ideal a conservar, mantener un amor consumado, conservar el fuego de la pasión, mantener la espita de la intimidad y confirmarnos en el tiempo.



Como el infierno tú, sacarme de líos, poder que no tiene, te lo perdiste o no, te has perdido un poco.

Admito que me estoy viniendo abajo, siempre prefiero darme de cabezazos, y tú como el infierno tú, qué difícil es resistir, esperar muriendo es más fácil, al menos para mí.

No te preguntes por qué, la reina sin rey, te lo perdiste o no, has sufrido un poco.

Admito que me estoy viniendo abajo, siempre prefiero darme de cabezazos, y tú como el infierno tú, qué difícil es resistir, esperar muriendo es más fácil, al menos para mí.

No, contigo en el infierno, ni hablar, no quiero insistir, y ya no me importa, si como dices tú, no se puede vivir.

Como el infierno tú, qué difícil es resistir, esperar muriendo es más fácil, al menos para mí.

Como el infierno tú, qué difícil es no marcharse, esperar muriendo es una enfermedad que ya no se cura, como el infierno tú.