martes, 4 de octubre de 2011

la marea Cuando vuelva ...y el mar llenito de redes...

Tengo equivocada la despensa, tengo suerte de tener restos de nostalgia, harapos con polvo en melancolía, tengo tardes de lluvia en mis sueños, arena que empapa, mar que aleja, bruma que se retira y marea que regresa….

Tengo susurrando en mi mente tu nombre y mis labios se resecan por la marea húmeda, porque las olas besan mis pies y me descarnan el alma, me arrancan y me desalman.

Y guardo el equipaje, vístete con el… cúbrete con los jirones de mi piel, con el pespunte de mi tristeza, arrópate con mi pesar…o desnúdate, y desgárrame, y revísteme de ti….o relégame entre silencios, entre lunas sin luz, para poder quedarme desnudo en esta orilla donde me moja la marea que vuelve…porque lo malo esta en el aire, en la lluvia, y en el flujo y reflujo de mis lágrimas…

Hay verdades en el viento, en ir a buscar cielo, en romper, en arrancar, en alejar vida por vida….en dejar desnuda la piel sobre la marea dormida…


Hay verdades en el viento, y lo malo está en el aire, y si no respiras, te mueres, y hay vida en la vida, y en otra vida, y en tu piel desnuda revestida de la mía….para que tu piel sea mi piel, sin pespunte, sin nostalgia, sin jirones…..solo piel calada, húmeda, mojada sobre la marea…

Préstame tu piel nostalgia, financia mi tristeza….y yo te entregare mis tardes de lluvia y sueños…cuando vuelva la marea, aunque lo malo este en aire, pero si no respiro me muero…



Tengo equivocada la despensa, tengo suerte de tenerte en la cabeza como quien tiene un fracaso, tengo un vaso (sal y espera), tengo un “no me llores que ya eres mayor”.


Débil de inspecciones técnicas sobre el abrazo, me descalzo y te envenena el dolor como el tabaco, me hace daño que te quedes tanto rato en el estanco, hasta ni vuelvas.

No tengo corazón…

Guardo el equipaje, se me olvida la reserva. Cuánto pesa este desastre de esperarte en cada fiesta, hasta que cierran y los bares no me cuidan, ni me tapan al dormir.

Lo malo está en el aire (y si no respiras, te mueres), el mar llenito de redes, la madera escucha y arde, hay dos cuerpos en la tarde entregándose al amor, hasta ser más en nueve meses.

No quiero volver a verte, te dí más importancia que a la paz mundial.

Volver a verte, volver a rendir cuentas con el mal.

Lo malo está en el aire y si no respiras te entiendo, el amor son dos rosales (tu y yo fuimos uno y medio), hay verdades en el viento cuando viene de “levántate chaval”.

Hay más de dos bellezas como tú que yo saliendo de la luz soy sol.

No quiero volver a verte, te di más importancia que a la luz vital.

Volver a verte, sería solamente naufragar.

No quiero volver a verte y tú jugando en la sala de estar contigo muero, me salvo de lo bello,
Adiós.


Adiós.