miércoles, 7 de mayo de 2014

07 – Mayo – 2014 (1/5) “Tontos Resucedes”

Lo cotidiano son esos verbos del diario, el habitual de la rutina, la normalidad del vivir (nos gusten o no)… pero se “resuceden” cada día con un acento distinto, una conciencia diferente en el despertar da un color diferente al cotidiano….

Despertar, es algo que se desprende del color de la primera mirada que recibimos, es esa primera caricia la que determina cuanto azúcar necesita el desayuno… Lo invisible del amanecer nos hace vulnerables…a base de repetir rutina empezamos a fabricar “resucedes”,  sin poner atención, sin tomar conciencia de que de tanto repetir estamos haciendo sin hacernos … y nos perdemos quizás esas escasas y apetecibles variaciones mínimas de cada “resucede”, lo esencial del apetecible…

Cada “resucede” en realidad es una mano visible al invisible, un tacto bajo la melodía continua del tictac que a poco que te dejes, deja de contar contigo…. y la sinfónica del cotidiano comienza estrenando esa prenda que ya sabemos que nos sienta bien, y ya conocemos la textura de la ilusión de su color, y ya sabemos de la magia posibilidad de combinar con otras prendas que ya estrenamos ….y vamos remezclando sentir a colores que coinciden con otros estrenos conocidos, sentires que recoinciden con el holgado de las mismas medidas conocidas… sentir experimentando es el cotidiano, recicladas lógicas maneras del natural, ecológica del vivir será… y lo ecológico dicen que es bueno….

… pero cada “resucede” tiene una semilla que permanece en silencio, solo tenemos que dejarnos a escuchar ese leve mensaje ausente…. Para después afanarnos en mimar ese germine y no dejarlo perdido en la eternidad de la rutina…. Cada “resucede”  tiene un lugar entre todas las estrellas que aspiramos, deseamos y melancolizamos….dicen que hay muchos más universos, infinitos como el nuestro…..Dime si no es para no volverse loco... ¿No te sientes más pequeño? Dos espejos frente a frente crearán cien mil caras que observar. Puede que alguno de ellos sea el real lo tendré que investigar.

Que empiece el viaje ya...

Infinita ingenuidad,
ilusión centesimal,