Leí libros disfrazado para ser bohemio, fume
cigarrillos sin boquilla, bebí whisky barato y otras modas progres que
desconocía…y en el medio de todo ese humo leí cien poemas que no entendía… y en
el medio de todo ese tiempo me hicieron el amor y el amor nos hizo… era otro
tiempo…hace tiempo y olvido de todo ese vivido…
Recorrí ciudades, países, nubes y vivido…baile melodías y sucedáneos de otras rítmicas rítmia sin celo, descubrí colores que eran dolor y otros tintes que amaron ingenuidad, viví sin recelo, sin nada que perder, con mucho que querer… de la manera más pura e ingenua que jamás volvería a hacer…
Lo admito, aprendí a vivir saltando todas las reglas
del juego, las que hicieron daño y las que no. Y al final todo resulto ser una
idílica forma de vivir, de querer… de soñar… aprendiendo que eso era vivir, que
eso era estar vivo.
Pero los días del escondite inglés quedan en mi
memoria y no vuelven… ya lo sé…
Algo he perdido, y algo gané, algo que yo no se
explicar muy bien que es, quizás un sueño, que por otro cambié y alguna
foto que quité de la pared…
El tiempo pasa a través de mi, lo escribo para mí
como grito de admirar, me enseñaron amar y no aprendí a abrazarte, quizás no
era el tiempo, quizás no era el verbo…o tal vez había demasiados verbos…:
B.- ¿No me digas que no fue fantástica la revolución
de Mao?
G.- Fantástica, todo el mundo con la misma camisa y
el mismo libro rojo de petete debajo del brazo...
B.- No seas cabezota, hay muchas mas cosas que eso…
G.- Lo
verdaderamente revolucionario y fantástico es que cada uno llevara el libro que
quisiera y la camisa que le de la gana….
B.- Aaaggg eres imposible…
Me gustaba perderme entre vinilos, libros
desconchado, y montones de papeles sin orden y sentido.. a penas entendía la
mitad de lo que leía y mas aun apenas entendía las anotaciones que hacia… a
pesar de todo, la tinta siempre se deslizaba y las palabras chorreaban en
caligrafía y sentido indescifrable, esto poco ha cambiado en el tiempo….
Algo he perdido, y mucho gané, y quizás los gritos no
iguales o quizás si…. no lo se, al fin y al cabo los argumentos siguen
arrebatándome la razón, y yo, mientras escribo sigo haciendo un entre
paréntesis al loco del vivir y dando suelta al loco del sentir... dibujar
palabras sigue siendo un “Agárrame fuerte y no me sueltes” en un espiral
delirante…
Calla, duerme, piensa, queda mucho por andar. La
carretera es tensa y llueve sin parar. Curvas, baches, bares, perros muertos
sin collar. Y la música que tú has traído para recordar a aquella niña, que
sabe Dios dónde estará. Me paso la vida, marcando un nueve uno, cambiando de
comida con mi ropa oliendo a humo.
